No busquéis zurraspa en el diccionario de la RAE porque os dirá que no existe ese palabro. Sin embargo a pie de calle, todos sabemos que la zurraspa es esa mancha en la ropa interior. Esa que por descuido, torpeza, inutilidad del operante o desidia del mismo nos delata. Se chiva de dónde venimos y lo que acabamos de hacer. Esto sucede, por desagracia figuradamente, en muchos otros aspectos de la vida. Fijarse nada más que en nuestros políticos aunque a ellos sus zurraspas les provocan bastantes menos sonrojos que a nosotros, pobres ignorantes del transporte público.
Aún así yo me he decidido a recoger fotos con palabras de todas las zurraspas que me vaya encontrando, incluidas las mías propias, faltaría más. Aunque sólo sirva para mi regocijo y el de los cuatro incautos que compartáis conmigo estos ratos.
Tengo que volver al curro ya. Corro el riesgo de que este blog deje su propia huella en mi ropa interior y me delate ante mi jefe.
Zurraspas del mundo, voy a por vosotras.
jueves, 31 de mayo de 2007
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